Nuestro segundo día en Maui, en realidad era ya el último día completo en el paraíso de Hawaii.
El plan del día era entonces un poco más relajado y conocer tranquilamente un lugar de la isla con el que nos fuéramos con un buen sabor de boca. El lugar elegido fue la zona costera en la parte oeste de la isla y la pintoresca ciudad de Lahaina.
En el día anterior les conté un poco sobre los exteriores del hotel. De día se ven mucho mejor las cosas, así que, este es el bonito jardín del hotel enfrente del océano.
Enfilamos dirección norte hacia la carretera 30. Los primeros kilómetros de la Honoapiilani Hwy son muy pintorescos. Al hacer la isla una forma de 8, se puede ver perfectamente la otra parte de la isla y el monte Haleakalā.
Como veis nos esperaba un día perfecto en la isla. El color azul del mar contrasta con el paisaje árido de esta parte de la isla.
Un poquito mas adelante llegamos a una playa preciosa y muy tranquila. De varios kilómetros de longitud y una tranquilidad increíble, estamos en Ukumehame Beach.
Una playa muy llana y tranquila, sin apenas olas, ideal para relajarse, tomarse un baño sin grandes masificaciones y porque no, hacer un poco de snorkel en los arrecifes de coral que hay a pocos metros.
En la playa vemos un gracioso cangrejo recolectando algo y en el agua unos piraguistas haciendo kayac.
Después de un buen baño seguimos la ruta, pasamos por Lahaina pero dejamos la visita para más tarde. Ahora el objetivo es encontrar motos acuáticas de alquiler, algo que no abunda en las islas Hawaianas, por lo que hemos visto.
Teníamos algunas referencias que podría practicar en la zona turística de Kaanapali y así fue.
Entramos en la zona hotelera por Kaanapali Pkwy y aparcamos el coche en uno de los parkings exteriores de alguno de los hoteles.
La playa de Kaanapali Beach es realmente hermosa y muchas veces ha sido usad como la «postal» de Maui. Los hoteles allí ubicados son de alta categoría y esto se nota en sus exteriores. Jardines hiper-cuidados, palmeras, tumbonas, hamacas, piscinas, caminitos… todo esta cuidado al mínimo detalle.
Algunos de los hoteles que allí se encuentran son:
Sheraton Maui Resort & Spa
Kaanapali Beach Hotel
Aston at The Whaler on Kaanapali Beach
The Westin Maui Resort & Spa
Hyatt Regency Maui Resort And Spa
Pues bien, en una zona de la playa había un chiringuito con actividades acuáticas, entre ellas, motos acuáticas también llamadas waverunner.
Esta era la plataforma en el mar con el servicio de alquiler.
Y este soy yo disfrutando como un niño de la libertad de una moto acuática.
Después ya era hora de comer y nos dirigimos a la salida de la zona turística, justo al lado del campo de golf donde había un sitio muy chulo para comer.
Paradise Grill Ka’anapali
Cuando nos fuimos, que grande el cartel en la salida del restaurante… Lo mejor para despedirnos de las islas.
Seguimos hacia el norte buscando nuevas playas fantásticas. Y las encontramos. En la zona norte, llegamos a Kapalua, y una vez allí, entre varias opciones visitamos DT Fleming Beach Park. La zona de Kapalua esta llena de bahías con hermosas playas. Algunas de ellas son:
Honokeana Bay
Napili Bay
Kapalua Bay
Namalu Bay
Oneloa Bay
Honokahua Bay
Mokuleia Bay
Honolua Bay
Honolua Bay es una playa curiosa. A parte de ser la última recomendada para el baño, es una playa completamente de piedras. Pero no piedrecitas no, pedruscos grandes como se ve en la foto. Eso si, el agua es un cristal, las olas nulas y una pecera llena de peces. Buen sitio para hacer snorkel. Hay bancos de coral.
Seguimos un poco más la carretera 30 al norte hasta el extremos mas septentrional de la isla y vemos como la costa ya es mas accidentada.
Con tanta visita se nos ha hecho de noche y no queremos visitar Lahaina de noche, sino que mañana, último día vamos a visitar la ciudad.
Nos vamos a cenar ni mas ni menos a Paia, en un restaurante que vimos el día anterior y nos causó buena impresión.